Mediante
estas técnicas proyectivas nos vamos a fijar principalmente en las aptitudes
para el trabajo. Valoraremos, en primer lugar, la agilidad o rapidez de
ejecución y la aproximación al modelo solicitado, el exceso de perfección o la
simplicidad, que nos hablarán precisamente del tipo de labor que podría
realizar el candidato.
También se advierte ciertos aspectos como: La posibilidad de
realizar un trabajo sedentario o activo, aislado o en grupo, de creatividad o
monotonía. Vemos también si la persona tiene ambiciones, ilusiones, ganas de
realizar proyectos nuevos, si es sociable y tiene facilidad de comunicación o
por el contrario tiene más facilidad para profesiones en las que necesita ser
callada y concentrarse en su trabajo.
Como puede verse vamos a aplicar los resultados de estas pruebas al
terreno estrictamente profesional.
Cada uno de
los dibujos nos adentra en aspectos concretos, y por ello se suele utilizar una
batería en la que se incluyen varios dibujos, el más utilizado es el H.T.P
(Casa-Árbol-Persona); Mediante este grupo de dibujos, vamos a ver diferentes aspectos: En el Árbol la
imaginación, fuerza interior y ciertas aptitudes profesionales; En la Casa el
grado de apertura y comunicación con el exterior y en la Persona como se siente
el candidato consigo mismo, su autovaloración personal.
Nosotros solemos incluir algunos otros dibujos que nos
resultan útiles como son el Pueblo y el
Horizonte del Mar. En el Test del Pueblo vemos el grado de sociabilidad y de
adaptación a los ambientes y en del Horizonte del Mar vemos el grado de
estabilidad de la vida de esa persona así como sus conflictos, ambiciones y
deseos de innovación.
Obviamente se puede obtener otro tipo de información que
entraría ya dentro del terreno clínico y privado de la persona y por ello no la
utilizaríamos en nuestros informes a menos que pudiera resultar perjudicial
para el desempeño de la actividad que debe realizar el candidato.